PROTEGER LA CREATIVIDAD


Hacer copias

makingcopiesMientras que el precio de las cámaras digitales en la actualidad hace que los trabajos creativos sean asequibles para muchas personas, en el pasado, solamente las personas más adineradas tenían acceso al arte. La realeza, los nobles o miembros de la corte que contrataban a un artista para que pintara su retrato podían recurrir al “retocado” moderno, pidiéndole al artista que ocultara sus rasgos menos atractivos o cambiara su apariencia por completo. Los reyes y las reinas en particular eran muy exigentes con cómo eran representados: controlar su propia imagen era tan importante para las celebridades como lo es ahora. En general, el acceso a la cultura y la educación estaba limitado a los más ricos y más influyente de la sociedad.

Estas restricciones también se aplicaban a la literatura. La creación de las primeras imprentas en Europa en el siglo XV permitió que se realizaran múltiples copias de textos escritos: un gran avance para la difusión de la cultura y las ideas. En Inglaterra, la monarquía no quería que se imprimieran determinados textos, por lo que asumió el control de todas las imprentas, un control que mantuvo durante alrededor de doscientos años. El Rey o la Reina decidían lo que se imprimía (o copiaba) y quién estaba autorizado a hacerlo. Al controlar la imprenta, el monarca que estaba en el poder intentaba controlar la información que llegaba a sus súbditos.

Debate
¿Crees que existe algún paralelismo con la época actual? ¿Determinados grupos o personas controlan lo que la gente ve o escucha?

¿Quién consideras que tiene más control? ¿Las empresas multinacionales, los gobiernos, los proveedores de Internet o los propios individuos?

¿Crees que la clase social es más o menos importante en la actualidad en lo que respecta a la comprensión y el acceso al mundo en general?

Control del derecho de autor

El Estatuto de la Reina Ana de 1709 fue la primera ley que otorgó al autor de una obra escrita el control de sus copias. Esta ley permitió a los escritores decidir dónde y cómo se reproducía su obra y así obtener más ganancias a partir de ello. El Estatuto explica los motivos por los que se aprobó una ley sobre derechos de autor: evitar los problemas causados por la copia no autorizada, es decir, aquella que se realiza “sin el consentimiento de los autores o propietarios de dichos libros o escritos, para su detrimento y con demasiada frecuencia para su ruina y la de sus familias”; así como para “prevenir, consiguientemente, esas prácticas en el futuro”. La ley tenía el objetivo de “alentar a los hombres letrados a crear y escribir libros de utilidad”. Protegía las obras existentes y fue concebida para proteger la creatividad intelectual de cara al futuro.

En la actualidad, las “copias” de obras originales están disponibles en diversos formatos, como la música digital, los archivos de imágenes y texto, los archivos de películas y el diseño web. Además, estos archivos se pueden manipular y reproducir. Poder copiar es sin duda más fácil, pero tener el derecho de poder copiar la obra de otra persona no es tan sencillo. El creador de una obra original sigue siendo el titular de los derechos de autor de esa obra. Es dueño del contenido y de las ideas. No es propietario de las copias en sí, de modo que un autor es dueño del texto que integra su novela, pero no de todas las copias realizadas de ese libro. Lo mismo ocurre con un músico y sus archivos de música digitales: es propietario de su obra creativa, pero no del objeto que la contiene.

Hacer una falsificación

makingafakeEn el mundo del arte, la falsificación es un problema conocido. Un Picasso original vale mucho dinero, una copia no, pero ¿qué ocurre si no notas la diferencia? ¿Y qué hace al “original” más valioso que una falsificación que se ve idéntica?

Coger algo que es propiedad de otra persona sin pagar es una cosa, pero ¿qué ocurre si se toma algo más abstracto como una idea? Copiar el diseño de otra persona, utilizar muestras de la música de otros, utilizar un cuento de otra persona, puede ser problemático, pero los límites no están claros.

¿Siempre tiene menos valor la falsificación que el original? Puedes dar ejemplos relacionados con el arte o el dinero para explicar tu respuesta.

¿Crees que es posible “robar” una obra creativa? ¿Es más o menos condenable que robar un bien material?

¿Es posible tener una idea verdaderamente original, en particular ahora que los medios de comunicación nos bombardean todo el día con mensajes e imágenes?
En Austria incluso hay un museo dedicado a la falsificación. Consulta en el sitio web del museo cómo definen los diferentes tipos de falsificaciones que existen.

http://www.faelschermuseum.com/Seite1_englisch.htm

Las mentes brillantes piensan parecido...

¿Alguna vez te has preguntado cómo es posible que las principales cadenas de ropa tengan estilos y diseños similares? Hay un largo periodo de ejecución entre el diseño de prendas de vestir, su fabricación y su distribución en las tiendas, de modo que no se trata simplemente de copiar lo que tiene la tienda de al lado. En el sector de la moda, los eventos como la London Fashion Week (semana de la moda de Londres) tienen gran influencia en las tendencias de las principales marcas: los diseñadores de renombre exhiben sus últimos diseños mientras que los periodistas de moda y los compradores toman notas y fotografías de lo que han visto. Los estilos, colores, modelos y telas son adaptados y reinterpretados para luego diluirlos y, finalmente, venderlos en las tiendas.

Diferentes marcas siguen tendencias de diseño muy similares al mismo tiempo para todo tipo de productos, desde zapatos hasta reproductores de MP3. La expresión alemana “zeitgeist” resume esta idea en términos del “espíritu característico de un momento determinado”. A nivel consciente e inconsciente, cada uno de nosotros puede estar influenciado por las ideas de otras personas, especialmente ahora que estamos expuestos a diario a miles de mensajes publicitarios en Internet, en las redes sociales, en los carteles, en la radio, la televisión y el cine.

Pero, ¿cuál es el límite entre la inspiración y las simples copias? La posibilidad de que una obra, concepto o diseño creativo que es “propiedad” de una persona sea “robada” por otra es lo que dio lugar al término “propiedad intelectual”. Los conceptos e imágenes pueden tener un valor real para las empresas y las personas, al igual que las acciones o los activos, de modo que parece razonable convertirlos en un tipo de bien que pertenece a un propietario legal.

Piensa en ejemplos que muestren la diferencia entre “estar inspirado” por algo y “robar una idea”.
En el mundo de la música, es habitual que los intérpretes versionen a otros cantantes. ¿Esto es inspiración o robo?

Productos inteligentes, propiedad intelectual

smartgoodsComo habréis visto, la innovación y la creatividad han sido importantes para la economía de muchos países durante mucho tiempo. Las empresas del sector creativo buscan nuevos diseños, nuevos productos y nuevas formas de ofrecer servicios a los consumidores con la finalidad de ganar ventaja en el mercado. Invertir en la investigación y el desarrollo de nuevos productos y servicios también contribuye a que la economía avance, pero es costoso. Cuando una empresa desarrolla un nuevo producto o servicio, lo último que desea es que los competidores comiencen a vender ese nuevo diseño “exclusivo”.

Entonces, ¿cómo pueden las empresas evitar largos litigios con respecto a sus diseños y productos?

Tarea de investigación
El sitio web de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual contiene mucha información sobre los derechos de autor, los diseños, las marcas y patentes, así como información general sobre PI. Puedes consultar su sitio web en http://www.wipo.int/portal/es/index.html.